Actualmente
la gran mayoría de compañías centra la seguridad informática en la
protección de los puestos de trabajo con herramientas tales como los
antivirus, cortafuegos, o sistemas de prevención de intrusos. Sin
embargo, los últimos estudios sobre el tema apuntan a que es conveniente
añadir otros niveles de seguridad para asegurar que la información
crítica está protegida.
Según un estudio que ha realizado la compañía de seguridad Imperva, los
ataques dirigidos mediante técnicas de ingeniería social desafían
continuamente estas tecnologías, y es a través de ellas como los
intrusos consiguen los privilegios para acceder a los datos más
críticos.
Los hackers saben que los datos sensibles de las empresas se alojan en
base de datos, servidores de ficheros, y aplicaciones; es por ello que
la seguridad hay que aplicarla también cerca de los datos, y no sólo en
el puesto de trabajo ó en el perímetro... Continuar leyendo