Hace muchos años, los teclados no venían con la letra “ñ” y quienes
necesitaban tipearla debían recurrir a un “código” para que esta letra
apareciera en sus textos. El “código” de la “ñ” era (y es) alt+164,
también se usaba mucho el alt+64 para la arroba.
Se trata de códigos ASCII, un acrónimo de American Standard Code for
Information Intercharge (que en castellano sería algo así como Código
Estándar Estadounidense para el Intercambio de Información). El ASCII
(que se pronuncia “ásqui”) es un código basado en el alfabeto latino y
fue creado en 1963 para ser utilizado en telegrafía.
Durante mucho tiempo se utilizaron los códigos ASCII para crear
imágenes, producto de que no existía todavía una forma de mostrar
imágenes en las computadoras. Por esto, y con los años, muchas personas
comenzaron a utilizar los códigos y sus formas, con fines artísticos. La
práctica de formar imágenes con códigos se transformó entonces en una
práctica artística.Esta utilización del ASCII lleva el original nombre
de “arte ASCII”, una técnica verdaderamente sorprendente en la que se
van creando distintas obras dibujándolas por líneas desde el teclado.
![](http://10rem.net/pub/blog/MicrosoftGoingOldSchoolwithASCIIArtProgr_E9DE/image.png)
Existe una película entera hecha con código ASCII, se trata de una versión de Star Wars. Enorme trabajo.
Algo muy interesante es que esta forma de expresión puede
materializarse con cualquier editor de texto y, claro, mucha paciencia
ya que el código se introduce por líneas. Si alguna vez bajaste un crack
o un serial que venía con un archivo .nfo probablemente hayas visto
algo de este arte, ya que es muy utilizado por crackers para sus firmas,
producto de que utilizar imágenes haría mucho más pesado un crack y
además, el ASCII es parte del mundo informático desde sus inicios.
![](http://www.bettworld.com/matrix/matrix/Ef-4-800.JPG)
En la película Matrix hay muchas escenas en las que el protagonista ve la “realidad” formada por código ASCII
Los primeros trabajos que se conocieron datan de 1966 y fueron
realizados por Kennet Knowlton, una de las pioneras en informática,
cuyos trabajos fueron reunidos en un libro que publicó junto a Leon
Harmon en 1966 titulado “Estudios en Percepción I”.
El arte ASCII puede haber tenido su origen en las impresoras
matriciales (las que imprimen puntitos y hacen un ruido ENORME, y hoy
son utilizadas mayormente para facturación) ya que su capacidad para
impresión de gráficos complejos es más bien pobre.
Hoy te traemos una app bien geek y muy divertida: ASCII Art, una
aplicación que te permite transformar tus fotos en código ASCII.
No sé si se haya discutido alguna vez -seguramente sí- si una
computadora es capaz de producir arte. Yo creo que sólo una humana puede
hacerlo, por lo que, aunque una humana haya creado el software, la
computadora sólo ejecuta sus órdenes y en consecuencia no podemos hablar
estrictamente de arte. Sí de un software que permite reversionar
imágenes con código ASCII, algo que al menos a mí resulta bastante
divertido.
ASCII Art es una aplicación gratuita para Android que permite tomar
fotos y pasarlas automáticamente a código ASCII. El resultado es
bastante agradable. Hay que remarcar que las desarrolladoras decidieron
arriesgarse y no incluir el efecto Matrix como opción dentro de la
configuración, lo que es toda una apuesta, y sí han incluido la
posibilidad de tomar fotos en escala de grises, monocromática y color,
cosa que no es habitual dentro de este rubro de aplicaciones.
Si tenés ganas de divertirte, de dar un toque creativo y original a
tus fotografías, o sorprenderte viendo cómo estos miles de caracteres
van conformando una imagen. Dale una probadita a ASCII Art.
![](http://larc.unt.edu/ian/art/ascii/shader/hires/ASCII-abbeyroad-gray1024.png)
Hablando de arte hecho por programas, en Mendoza tuvimos una gran
creadora de este tipo de software, una gran profesora y mejor persona
que murió hace algunos años. Se llamó Enrique Gonzalez, le decíamos
-como no podía ser de otra forma- Quique, y daba clases de fotografía en
la licenciatura en Comunicación Social de la UNCuyo. Hablaba 18 idiomas
regulares y 6 auxiliares. Fue un tipo muy ácido, muy crítico, muy
sincero también, esto le costó tener muchos problemas políticos en la
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, donde daba clases.
Cierta vez, un amigo comentó al Quique que tenía ganas de leer un
libro que nunca nadie haya leído. Quique contestó que por lo menos quien
lo escribiera debía leerlo y se propuso como desafío hacer un libro que
no haya sido leído ni por su autora. Así fue que desarrolló un software
para que escribiera un libro de Haiku, lo imprimió, y sin leerlo lo
entregó a su amigo para que pudiera darse el gusto de leer un libro que
nadie hubiera leído. Dedico estas líneas a este enorme tipo que ya no
nos acompaña y a quien guardo un enorme cariño.
¡Happy Hacking!
Fuente http://www.tribunahacker.com.ar/2014/07/conoce-un-fantastico-efecto-fotografico-para-android/