El robo de información en Internet es ya un problema endémico. A través
de las webs de las empresas, los piratas informáticos pueden acceder a
las bases de datos, suplantar la identidad de los usuarios o realizar
interrupciones del servicio, entre otros actos delictivos.
España es el
segundo país más atacado del mundo después de Estados Unidos y
concentra el 20% de los ciberataques internacionales, según datos de la
compañía española de seguridad
S21sec,
que opera con 26 empresas del IBEX 35. Pese a la proliferación de los
delitos en la red, no hay suficientes expertos en ciberseguridad que
implementen muros para evitar las fugas de datos.
"En España debería existir un grado de ingeniería especializado en ciberseguridad. Hacen falta profesionales bien formados", señala José Luis Narbona, presidente de la
Asociación Nacional de Ciberseguridad y Pericia Tecnológica. En los últimos cinco años se ha contratado a más de 23.000 expertos en este campo, según datos del
Servicio Público de Empleo Estatal
(SEPE), pero el 22,73% de los ingenieros TIC españoles tienen un nivel
de formación "inadecuado" y "falta de formación práctica", señala el
estudio
Necesidades de Formación en el Sector de la Seguridad de la
Fundación ESYS.
A escala global, el déficit de estos expertos supera el millón y la
mayoría de organizaciones no disponen de personal para monitorear las
redes y detectar infiltraciones, indica el
Informe Anual de Seguridad de Cisco 2014, empresa tecnológica que cotiza en el Nasdaq.
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El País