Una de las cosas peor pensadas de
Facebook son los eventos. Me imagino que los crearon tratando de proveer
de una plataforma de ventas pero no resultó como querían y terminaron
por transformarla en lo que actualmente es.
Tal vez te parezca que la voy de lapidaria y en consecuencia digo
estupideces con la intención de mantener la postura lapidaria. Soy
consciente de que estoy contradiciendo al 90% de las artistas -entre
muchísimas otras- que hoy se autogestionan y confían en las redes
antisociales para convocar a sus eventos. Eventos del tipo que fueran:
conciertos, recitales, desfiles, fiestas, y demás.
Yo misma la uso mucho para conciertos, ya que algo que hago es
producir conciertos para artistas autogestivas y/o independientes. En mi
experiencia el porcentaje de éxito en la relación entre quienes indican
que irán a un evento determinado y las que efectivamente lo hacen no
supera el 10%. Pero tampoco es determinable, es la lotería de la
producción, no se puede saber a ciencia cierta cuándo estará lleno, por
lo que no se puede andar jugando mucho con los números.
Este
porcentaje era muy superior cuando se estrenó esta función, recuerdo
que durante cuatro o cinco meses la relación era mucho más clara: un 60%
o 70% de quienes se comprometían a participar en un evento,
verdaderamente lo hacían.
¿Qué pasó? Bueno, no puedo explicarlo a ciencia cierta porque no
tengo forma de llegar a datos certeros, concisos, pero tengo una
especulación. Creo que la herramienta se contaminó y Facebook hizo una
mezcla de notificaciones que no colabora con que la herramienta
efectivamente sirva para convocar a eventos. El sistema de
notificaciones de la red antisocial se ve totalmente tapado por el ruido
visual que ha impuesto Zuckerberg a su red con el objetivo de volverla
más adictiva.
Una timeline que no para de mostrar posteos de todo tipo (como la de
Twitter, conocida por generar cierta dependencia), cuya temática es cada
vez más selectiva (es alevoso que en nuestra timeline aparecen posteos
de nuestras amigas que nos van a interesar, los que no, quedan rezagados
a que los veamos cuando visitamos el muro de nuestraamiga) basada en
nuestras cookies, en determinados momentos del día aparecen temáticas
(fotos, frases, memes, etc) y luego se sumó una barra de notificaciones
aun más rápida donde aparece una suerte de ticker donde nos muestran los
“me gusta” y otros datos de nuestras amigas asociadas a publicidad.
El concepto es el mismo que el de un hotel: consumí todo lo que quieras consumir, pero hacelo acá.
El asunto es que el nivel de ruido, sumado a factores menores, por lo
general relacionados a lo social o emocional como puede ser que alguien
coloque que asistirá a un evento sin voluntad de hacerlo por compromiso
con quien la invitó o porque quien la invita es una referente
(suponete: una famosa, o es directamente la artista que se presentará,
etc), han terminado por estropear completamente esta herramienta. No es
creíble, y así y todo el 90% de las producciones centran su publicidad
allí. Imaginate si Facebook se ocupara más en que fuera útil y menos en
que te quedes en su red por dependencia.
Cuando se masificó la herramienta, la empresa vio un peligro de
convocatorias no deseadas realmente muy alto, por lo que llevó adelante
una serie de maniobras para desairar el SPAM, el tema es que a esa
altura ya muchas teníamos perfiles 100% dedicados a convocar a distintas
producciones, por lo que con esa movida nos complicó las cosas
obligándonos a invitar una por una a nuestras amigas.
Resulta
que no hay nada que no sea hackeable y hoy te traemos un código que
permite seleccionar de una vez a todas tus amigas de Facebook para
invitarlas a un evento. Toda la perorata de más arriba es porque
realmente es bueno saber que la herramienta no es útil para convocar. Lo
es muchísimo más un email, o un meme, o un flyer en tu muro, pensá
seriamente a cuántos eventos verdaderamente vas y cuántos además leés
con atención. Pero hay otro tema: cuando un evento tiene muchas
convocadas (más allá del número que señale que asistirá, y mucho más
allá del número que efectivamente asista) genera una imagen de
fortaleza. Así es por ejemplo, que la municipalidad anunció la puesta en
vigencia del código de convivencia que castiga más la proesta social
que el maltrato a niñas y ancianas un día antes de la marcha de protesta
organizada contra el código.
Por lo que, desde aquí, te invitamos a que luego d tomar las
consideraciones del caso, de sopesar si realmente a todas tus amigas de
Facebook les interesará asistir a tu evento o si, como en el caso
anterior, vale la pena enviar SPAM a tus seres queridos para poder
agrandar el número de invitadas a una marcha, utilices el código que te
traemos hoy.
La forma de usarlo es muy simple:
1) Andá al evento.
2) Seleccioná “invitar contactos” o la función que te muestre el listado de contactos al que pretendés invitar.
3) Pegá el código en la barra de direcciones de tu navegador.
4) Esperá. Si tenés miles de contactos, va a demorar en seleccionarlos a todos.
5) Una vez que estén todos seleccionados, dale “invitar” y se acabó el tema.
El código:
javascript:var
elms=document.getElementsByName("checkableitems[]");for(var
count=0;count<elms.length;count++){var t =
setTimeout("elms["+count+"].click()",100)}
Esto lo que hace, lisa y llanamente, es ordenar lo mismo que harías vos con el mouse, NADA MÁS.
¡Usalo con responsabilidad!
Autor Pablo Lozano