Desde sus inicios, uno de los sueños más grandes de la ciencia es
conocer a profundidad el funcionamiento del cuerpo humano y sus órganos y
tejidos. Ahora
Google quiere involucrarse en esta búsqueda.
La empresa anunció que iniciará un proyecto llamado ‘
Baseline Study’
en el que pretende recolectar información genética y molecular de 175
personas para crear el mapa más grande de lo que debería ser un
cuerpo
sano, como informó
The Wall Street Journal. Es liderado por
Andrew Conrad,
un biólogo molecular quien fue el pionero en hallar el virus del Sida
en las pruebas de sangre, quien actualmente trabaja en
Google X, la
división de proyectos avanzados de la firma de Mountain View.
El estudio comenzará en este verano. Una firma realizará las pruebas
clínicas y los exámenes incluirán la recolección de fluidos corporales
como orina, sangre, saliva y lágrimas.
Google afirmó que no iba a dar a
conocer el nombre de la compañía encargada de tomar las muestras. La
Universidad de Stanford y la Universidad de Duke ayudarán a analizar los
resultados.
El proyecto pretende ayudar a los investigadores a detectar las causas
biológicas de enfermedades del corazón y el cáncer, para que la medicina
se enfoque más hacia la prevención y no únicamente en el tratamiento de
la enfermedad.
El doctor Conrad afirmó que: “
La noción siempre ha sido encontrar
problemas. Eso no es revolucionario. Nosotros nos estamos preguntando:
si realmente queremos ser proactivos, ¿Qué debemos saber? Tenemos que
conocer qué está arreglado y cuál es la forma en que las cosas deberían
funcionar”.
La intención de
Google no es centrarse en unas enfermedades específicas.
Por esto, recolectarán una gran cantidad de muestras usando varias
herramientas de diagnóstico. Así, la compañía pretende encontrar
biomarcadores o patrones en la información que encuentren. Con éstos,
los investigadores médicos podrán detectar cualquier enfermedad.
Así, por ejemplo, el estudio podría revelar el biomarcador que facilita
la digestión de las comidas grasosas eficientemente. De esta forma, las
personas vivirían más, dejando atrás los altos niveles de colesterol y
las enfermedades del corazón. Además, los investigadores comprobarían si
otras personas carecen del biomarcador y los médicos ayudarían a
modificar su comportamiento o desarrollarían un nuevo tratamiento para
ayudarles a cumplir esa función.
Google afirmó que la información del proyecto iba a ser confidencial y
su uso estará limitado a objetivos médicos. Los datos no se compartirán
con compañías financieras. En el futuro, estos conocimientos representan
un dilema ético porque las aseguradoras podrían usarlos para reducir
sus riesgos. Además, en las entrevistas de trabajo y las propuestas
matrimoniales, las personas podrían ser rechazadas por sus
características biológicas.
Por esta razón, el estudio del mapa del cuerpo humano será monitoreado
por las instituciones médicas como la Universidad de Duke y la
Universidad de Stanford que supervisarán la forma en que se utiliza la
información de los voluntarios que participan en la investigación.
Fuente:
Enter.co - Imagen:
Geralt