Alucinados nos quedamos
ante la posibilidad de tener 200 GB en un tamaño tan reducido como una
tarjeta microSD. El modelo era un nuevo lanzamiento de Sandisk y desde
que lo conocimos nos saltó una idea en la cabeza: ¿cómo sería convivir
con una de estas tarjetas en nuestro smartphone?
Dicho y hecho. En Xataka hemos estado probando una de las nuevas Sandisk de 200 GB y os contamos cómo es eso de poder ampliar la memoria interna de nuestro smartphone con 200 GB extraíbles y rápidos, y para qué nos ha resultado más útil disponer de esta opción.
Antes de empezar con nuestra experiencia, unas premisas. La primera y
más contundente es que una tarjeta como esta de Sandisk tiene por ahora
un precio de más de 250 euros (está por 220 euros en Amazon), por lo que no se trata de una inversión que se pueda decidir o aprovechar a la ligera.
En todo caso podría tener más sentido cuando ya hemos realizado una
inversión en un smartphone de gama alta y realmente por el uso que damos
al smartphone necesitamos esa capacidad extra de forma directa y
sencilla. Pero el caso es que son ya muy pocos los modelos que cumplen
con esta condición. En nuestro caso hemos realizado la prueba con un LG
G4.
Por último, la capacidad de la tarjeta de memoria no lo es todo. Si
no alcanza velocidades de escritura y lectura similares a las de la
memoria interna o al menos suficientes para que no se ralenticen
o sean inviables usos comunes en los que vamos a recurrir a esta
memoria extraible, no nos vale. En este caso el modelo de Sandisk es UHS-I Clase 10, por lo que este último punto está garantizado, como hemos comprobado con nuestra experiencia y herramientas de benchmarks.
Fotos en RAW y vídeo 4K sin miedo
Una de las características que me gustó al probar el LG G4
era que nos dejaba abierta (y además de forma muy sencilla en los
propios menús de la cámara) la posibilidad de decidir dónde queríamos
almacenar las imágenes y vídeos que tomábamos con él. Con un solo toque
en la pantalla podíamos cambiar entre la memoria interna o una tarjeta
de memoria.
Era lógico que esa fuera mi primera opción a la hora de pensar cómo
sacar partido de una tarjeta microSD de tanta capacidad y velocidad. Con
fotos que ocupan de media entre 4 y 6 MB si las disparamos en jpg o de
más de 20 MB si optamos por archivos RAW, ráfagas o disparar sin miedo a
que nos quedemos sin memoria interna a las primeras de cambio es una de
las principales ventajas de tener una tarjeta microSD de gran
capacidad. Y velocidad.
En nuestra prueba comparamos la velocidad de disparo en modo normal,
ráfaga y RAW tanto cuando guardábamos en la memoria interna como cuando
lo hacíamos en la tarjeta microSD de Sandisk y no había absolutamente
ninguna diferencia.

Si además somos de grabar mucho vídeo con nuestro smarpthone, aquí
una tarjeta microSD de gran capacidad nos da un valor extra. En modo de
vídeo 1080p salimos a unos 20 MB por cada 10 segundos de vídeo, y si
recurrimos al vídeo 4K, ese peso de los vídeos se duplica hasta los 40
MB.
Aquí la ventaja de la tarjeta microSD también se traslada, según el
caso, a la transferencia de los brutos al ordenador. Lo habitual en mi
caso es tener activada la copia automática de las fotos en servicios
como los de Dropbox o el de Fotos de Google, pero cuando realizo pruebas
o sesiones de fotos con el smartphone, la mayoría de imágenes las
quiero ver tranquilamente en el ordenador, y sacar la tarjeta y
colocarla en el ordenador para traspasar decenas de GB de fotos y vídeos
me resulta más cómodo de esta manera y no mediante cable. Por no decir
cuando el trabajo realizado he de pasarlo a un compañero directamente
pero no quiero desprenderme del smartphone.
Un centro multimedia en el bolsillo

Hay música en streaming. Sí. Nadie duda de ello. Y son buenas
opciones, pero más de una vez me he visto queriendo traspasar mi
biblioteca de música, de muchos GB, a un smartphone para poder
escucharlas sin consumir datos. Aquí la ventaja de tener una tarjeta microSD de 200 GB en el smartphone es directa, tanto para facilitar la copia de la música desde el ordenador como para que no nos ocupe nada en la preciada memoria interna, que debería estar realmente centrada en las aplicaciones.
Lo mismo me ha ocurrido con los vídeos. Teniendo un dispositivo como Chromecast conectado al televisor, estas semanas usando el LG G4 con la tarjeta microSD de Sandisk me he olvidado de centros multimedia fijos para traspasar mi biblioteca de cine y series directamente a la tarjeta de memoria.
Una vez que te acostumbras es muy cómodo poder "lanzar" contenido al
televisor simplemente sacando el smartphone del bolsillo y con todo el
control en la pantalla del terminal.
Hay que decir que una buena experiencia con el almacenamiento externo
en un smartphone depende mucho de lo fácil que lo ponga el fabricante.
En nuestro caso lo hemos probado en el LG G4 y la interfaz personalizada
sobre Android 5.0 nos pone realmente sencillo y de forma muy visual y
atractiva el poder gestionar las diferentes opciones de almacenamiento.
Pero si no es el caso de tu smartphone, Sandisk tiene su propia
aplicación, que divide el contenido por categorías (aplicaciones,
música, imágenes, vídeo ...) de forma automática y aunque no es nada
atractiva visualmente, cumple con su función, permitiendo traspaso
rápido de contenido de tarjeta a memoria interna y viceversa, además de
poder realizar búsquedas en su contenido.
El dispositivo ha sido cedido para la prueba por parte de Sandisk. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas
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@solenoide
Lead editor en Xataka