
En Ozarow Mazowiecki (Polonia) se celebra una feria especilizada en el desbloqueo de
coches, una feria en la que exponen
las últimas técnicas empleadas por los ladrones para robar coches.
Fernando Romero se encuentra junto a la cerradura de un BMW Serie 7
actual. Este colombiano creció en Londres, y mantiene un próspero
negocio de cerrajería en Edimburgo. ¿Sus clientes?
"Por encima de todo, talleres", confirma Romero.
En el ojal de su polo y sobre el hombro lleva estampada una aguja
dorada, símbolo de la unión de cerrajeros. Él es uno de los más
respetados del ramo. Romero sonríe y desliza una delgada herramienta
hacia el interior de la cerradura del BMW.
El utensilio se asemeja a una tenazas. La primera mitad la presiona
contra el cilindro; la segunda la utiliza para generar tensión. De esta
manera tantea qué clavijas deben ser presionadas.
"La tensión es la llave del éxito", hace saber a su público.
"Si la clavija número siete está dura, ahí debo picar".
Tras poco más de dos minutos, la puerta del coche se abre. Algunos
asistentes no ocultan su asombro. "¿Qué hago en caso de helada?",
pregunta alguien. "Use líquido descongelante", responde Romero.
La primera demostración finaliza, y en la segunda hora otro especialista
cerrajero explica el siguiente paso: cómo arrancar el Serie 7 sin
llaves. Fernando Romero se retira al salón de baile del hotel. Por
supuesto, no puede estar seguro de que todos sus oyentes fueran
empresarios de la industria de las
llaves venidos de Polonia,
Bielorrusia o Rusia, donde las mafias internacionales de robo de coches
campan a sus anchas.
"Cuando alguien me hace alguna pregunta que me hace sospechar que busca una finalidad perniciosa, lo echo de la sala", nos dice en referencia a otras clases anteriores.
Una maleta para robar coches
En Reino Unido, cada solicitante debe identificarse previamente y
obtener una autorización. En el estand de la firma libanesa Simon Touch
se exige discreción. Aquí se pueden observar dos pequeñas maletas con
las que se puede abrir y robar un coche.
Antes de poder ser probadas en la Interkey Service 2014, un ejecutivo
cuenta que la
tecnología está aún por madurar. En principio, estas
maletas solo pueden ser adquiridas por las autoridades. Como por
ejemplo los servicios secretos, para registrar automóviles sospechosos.
La herramienta se vale del punto débil de los sistemas
Keyless-Go
que permite abrir la puerta y arrancar el coche, sin sacar la llave
del bolsillo. Para que el vehículo la reconozca, la llave manda
constantemente una señal. Esta es la que capta el sistema de Simon Touch
y la envía a un cómplice, que debe estar a un máximo de 400 metros.
Éste, a su vez, tiene una caja emisora y receptora, que recoge la señal
y la envía al coche. Así, se abre la puerta y se arranca sin
problemas. No hemos podido probar este sistema, aunque en la web de la
firma aseguran que es efectivo en todo tipo de vehículos.
Las herramientas para robar coches se exponen sin pudor tras las
vitrinas. Allí relucen las
llaves de nuevos modelos, junto a ellas
también están los dispositivos con un conector OBD. Se enchufan al
mechero del coche y en los talleres suelen usarse para realizar un
diagnóstico de la electrónica. Pero estas cajitas del tamaño de una
cajetilla de tabaco también desconectan el bloqueo del coche y son
capaces de hacer las mismas funciones que la propia llave. Solo que
nadie quiere enseñárnoslo.
"Su coche es aún demasiado nuevo, y nosotros no hacemos demostraciones a la prensa".
Pero lo que es seguro es que aquí se puede comprar un kit de
iniciación para ladrones. Uno compuesto de ganzúa, enchufe OBD y una
nueva llave sale por 700 euros. El siguiente equipo, ya solo para
profesionales, vale el doble, como poco.
El truco de la nueva llave: enceder el motor en tres segundos
El llamado conector OBD, normalmente situado junto al volante, estaba
en principio pensado para su uso exclusivo en talleres especializados.
Sirve para realizar un diagnóstico de los posibles fallos o averías del
vehículo gracias a que puede conectarse a la centralita. Sin embargo,
esto es lo mismo que dejarse las llaves de casa puestas para que, si
viene el repartidor, deje la compra dentro: puede pasar cualquiera con
intenciones no tan buenas ya aprovecharse. Con un ordenador y el
‘software’ adecuado conectado al coche a través del módulo OBD se
pueden modificar toda clase de parámetros electrónicos del vehículo y,
por supuesto, desconectar el bloqueo y transmitir la información a una
nueva llave en pocos segundos.
Conclusión
Confort contra seguridad, el eterno dilema. Los sistemas Key-GO son
geniales cuando tienes las manos ocupadas. Pero la comodidad tiene un
precio: los ladrones pueden piratear tu señal. En esta feria hemos
descubierto este y otros sorprendentes puntos débiles.
Fuente: AutoBild