En la actualidad, las organizaciones hacen uso de tecnologías de la
información para su operación diaria. El logro de sus objetivos se debe
en gran medida a su utilización. Sin embargo, existen riesgos inherentes
a ellas, es decir, la posibilidad de que una debilidad sea aprovechada
por una amenaza y sus consecuencias: divulgación, modificación, pérdida o
interrupción de
información sensible.
Las herramientas y medios técnicos por sí mismos ya no garantizan un
adecuado nivel de seguridad con relación al manejo de la información. En
este contexto, las políticas de seguridad surgen como una herramienta
para ayudar en el proceso de concientización de los miembros de una
organización, sobre la importancia y sensibilidad de la
información,
además de ofrecer un marco normativo para el uso adecuado de la
infraestructura de TI.
De acuerdo con la encuesta
The State of Network Security 2012,
realizada a más de 180 profesionales de seguridad de la información y
TI, la mayoría de los incidentes de seguridad de la información que se
producen en las organizaciones son ocasionados por los propios
empleados, ya sea por descuido, desconocimiento o intencionalmente,
debido a que no existen mecanismos de control que regulen su conducta.
En otras palabras, no existen políticas de seguridad de la
información.
Si no existe una política, el empleado no dispone de normas, desconoce
los límites y responsabilidades asociadas a las actividades que
desempeña.
El desarrollo de políticas de
seguridad puede verse como una labor
complicada debido al bloqueo creativo del responsable durante la
redacción y generación de su contenido, generalmente suelen ser víctimas
del síndrome de la hoja en blanco. Para evitar esto, es recomendable
responder las siguientes interrogantes:
- ¿Quién debe ser la persona responsable de crear las políticas?
- ¿En qué estándar o mejor práctica deben tener base?
- ¿Cuáles son los ámbitos de aplicación?
- ¿Qué estructura debe tener el documento?
- ¿Cómo redactar los enunciados?
- ¿Existen o deben crearse otros documentos que complementen a las políticas?
- ¿Cómo deben difundirse entre los empleados?
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