Un grupo de argentinos lanzó la primera valija inteligente del mundo
Costará 450 dólares
A través
de una aplicación en el celular se la puede rastrear, abrir y cerrar
remotamente y hasta incluye un cargador de batería.
Puede ser rastreada en caso de pérdida, abrirla y cerrarla a través del celular, e incluye una batería para cargar el teléfono o la computadora en esas horas eternas de espera en los aeropuertos. Esas son sólo algunas de las prestaciones que ofrece la primera valija inteligente del mundo diseñada por argentinos y presentada con gran éxito ayer en Estados Unidos.
Bluesmart
es el nombre del proyecto que encararon Martín Diz, Alejo Verlini y
Diego Saez-Gil bajo la dirección de Tomi Pierucci. Todos son argentinos, tienen entre 28 y 33 años y actualmente están repartidos entre Estados Unidos y China.
“Todos viajamos mucho y las veces que nos juntábamos hablábamos de los
quilombos que implica perder la valija. De cómo a uno se le había
arruinado la Navidad porque ahí llevaba los regalos para la familia.
Somos todos medio fanáticos de la tecnología y estábamos viendo que hay
todo tipo de cosas conectadas, hasta inodoros, entonces nos preguntamos ¿cómo puede ser que una valija no sea inteligente?”. Así surgió la idea que acaban de materializar, cuenta Alejo en diálogo con Clarín desde Nueva York.
La
valija inteligente puede ser usada por cualquiera, pero es el “chiche”
que le faltaba a los viajeros amantes de la tecnología, especialmente
para aquellos que hacen viajes de pocos días por trabajo. “Soluciona los
problemas de muchos viajeros del mundo, ya que 25 millones de valijas
son perdidas o maltratadas por año por las aerolíneas”, sostiene Alejo.
El novedoso equipaje incluye una micro-computadora, un GPS y
diversos sensores que se comunican vía bluetooth con el celular del
pasajero y con Internet. Se puede controlar a través de una
aplicación en el teléfono, abrir el candado en forma remota, traquear la
ubicación de la maleta (tiene un banco de memoria y se puede rastrear
dónde estuvo) y recibir notificaciones y reportes durante el viaje.
Además, trae una batería en la que podés cargar otros dispositivos. “Y
se puede programar para que se abra cuando estás cerca o se cierre
cuando te alejás, como el Batimóvil”, bromea el diseñador industrial de
28 años, que viajó a China donde visitó más de 20 fábricas para evaluar
las tecnologías que iban a implementar.
“Desarrollar
un producto tecnológicamente complejo como este ha llevado muchísimo
trabajo y coordinación de un equipo multidisciplinario de varios
países”, sostuvo Tomi Pierucci. El proceso llevó más de un año. El 80% del proyecto se hizo en células diferentes: el diseño y el desarrollo, en Argentina,
liderado por Alejo. La tecnología en Buffalo, Estados Unidos, donde
estaba el ingeniero y la fabricación, en China. La marca fue patentada a
nivel global en Nueva York.
El producto lo lanzaron ayer en Indiegogo,
una plataforma de financiamiento colectivo que permite que clientes de
todo el mundo colaboren con el proyecto y compren la valija por
adelantado a un precio menor (entre 195 y 295 dólares). En sólo dos
horas llegaron al objetivo y lograron recaudar los 50.000 dólares que se
habían planteado como base y en el primer día ya llevaban reunidos más del triple.
“Nos sirvió para testear si el producto gustaba o no y juntar el
capital inicial para matricería y para mandar a producción”, explica
Alejo. Tras la finalización de la campaña empieza la etapa de
fabricación de las valijas que serán entregadas en julio de 2015 a
quienes hagan ahora su aporte.
“No hubo una respuesta
moderada. Fue muy de golpe. Nos vimos desbordados emocionalmente,
físicamente, todo. Nos llamaron distribuidores, free shops, que nos
piden la valija y nos preguntan cuándo la vamos a tener lista”, cuenta
Verlini, que antes de Bluesmart fundó la agencia de diseño y marca NSNC.
Cuando sea producida masivamente y salga al mercado, la valija costará 450 dólares.
“Nuestro
proyecto representa las posibilidades de la nueva economía digital y
demuestra que con mucho trabajo se pueden crear cosas grandes desde
Latinoamérica o cualquier lugar del mundo. Esperamos que esto inspire a
que otros chicos se animen a ser emprendedores y lanzar sus propios
proyectos innovadores,” concluyó otro de los padres de la valija
inteligente, Diego Saez-Gil.