No es fácil elegir el alojamiento en la nube más adecuado para tu web o
tu aplicación, el cloud evoluciona a pasos tan grandes que conocer con
seguridad el
servicio idóneo de antemano es casi imposible, por eso hay
que valorar todos los aspectos con detenimiento. Aquí tienes
cinco consejos y tablas para elegir el mejor servicio [PDF] que te pueden ayudar antes de contratar servicios de cloud
computing.
1. Más que el cloud adecuado, busca el
servicio adecuado. El grado de
colaboración con un proveedor que diseñe el entorno en el que tu equipo,
tu aplicación y tú vais a trabajar de la mejor manera posible, resulta
decisivo. Cloud público, privado, híbrido, servidores dedicados, espacio
local o en cabina, volumen de throughput, CDN, caché… Hay infinidad de
servicios, infinidad de nombres, pero lo que necesita saber tu hoster
para construir la solución adecuada son cosas como el número de
lecturas/escrituras por segundo, sesiones concurrentes, usuarios
distribuidos geográficamente, procesos automatizados de subida de
código, entornos de integración y desarrollo, preproducción, producción…
En definitiva, tus necesidades reales.
2. La conectividad es la base. Desde el acceso seguro a la gestión de tu
aplicación, hasta el SEO y la experiencia del usuario, el papel de la
conectividad es crítico. Si tu web o tu aplicación es pública, que los
servidores estén ubicados en un punto neutro de intercambio de trafico
es fundamental. Y, por otro lado, nos interesará tener acceso seguro a
los servidores desde nuestra oficina en el caso de una aplicación
corporativa. Por todo esto resulta casi vital integrar el alojamiento en
una solución de conectividad global donde la red sea privada y los
accesos estén totalmente controlados por una empresa que ofrezca también
servicios gestionados de redes y realice peering a nivel internacional.
Claranet, proveedor de cloud
computing independiente, es uno de los
pocos que ofrece estas soluciones en España.
3. Diferencia entre LA aplicación y TU aplicación. Se puede considerar
LA aplicación como un Software as a Service, es decir, algo cerrado por
lo que pagas cada mes y que cambia relativamente poco desde que se
diseña la solución hasta que se pone en marcha como, por ejemplo, correo
o escritorios virtualizados. Por otro lado, puede ser que quieras
alojar TU aplicación propia, ya sea web o corporativa. En este caso
tendrás que buscar y elegir el proveedor con el que, entre otras cosas,
trabajes y construyas más a gusto la plataforma de alojamiento idónea. Y
si no lo hace él contigo, que te permita hacerlo muy bien solo, tan
bien que nunca te equivoques en tus decisiones.
4. Que el hoster conozca tu sector y sepa cómo trabajas. Cuanto más
crece la solución en volumen y complejidad, más importancia adquiere la
forma de trabajar y la relación con un proveedor que sepa exactamente lo
que necesitas. Eso, sin embargo, va a depender mucho de tu dinámica: si
requieres cambios constantes, si necesitas automatizar procesos, qué
flexibilidad quieres en tus recursos y facturación, etc. Por otro lado,
que la empresa proveedora tenga experiencia en tu sector facilita mucho
ese entendimiento en el tramo inicial: si te dedicas, por ejemplo, al
comercio electrónico, te puede interesar un proveedor especializado en
Hosting para Ecommerce.
5. Legislación y requisitos, cumplir sí o sí. Dependiendo de tu negocio,
los requisitos pueden ir desde cumplir normas ISO o PCI DSS, hasta
encriptación de datos o backups de retención anual, sin olvidar el nivel
de seguridad en acceso a servidores, Tier de data center o políticas y
servicios relacionados con ataques DDoS. Servicios en la nube como los
de Microsoft o los de Amazon ofrecen una gran escalabilidad pero a
menudo no cumplen las normativas concretas de empresas o clientes fuera
de Estados Unidos ni sus necesidades de gestión y soporte. En
definitiva, se trata de conocer tu negocio. Si sabes cuáles son tus
procesos de desarrollo y despliegue, si tienes claro lo que quieres
hacer y lo que quieres que hagan por ti, darás con el servicio de cloud
computing más adecuado.
Además,
aquí y
aquí hay una mini-comparacion entre los distintos proveedores de Cloud Open Source.
Fuente:
Revista Cloud Computing